Información sobre Certificación Forestal y Servicios al ecosistema
El estándar nacional de Gestión Forestal es un documento creado mediante un proceso participativo y transparente que, establece los requisitos que propietarios y gestores forestales deben cumplir para obtener la Certificación FSC de Gestión Forestal, evaluados y auditados por entidades certificadoras independientes.
FSC no emite certificados, ni realiza auditorías, son terceras partes independientes las que están acreditadas para realizar el proceso de certificación forestal.
La certificación FSC es una inversión en la mejora de la calidad de la gestión forestal que redunda en un incremento de los beneficios económicos, sociales y ambientales. Nuestra sociedad es cada vez más consciente de los desafíos vinculados al monte y a las áreas forestales, y evoluciona hacia patrones de consumo responsable. Los propietarios y gestores forestales tienen diversas herramientas FSC para planificar y colaborar con otros actores y partes interesadas en una gestión forestal más responsable (Estándar español, estándar grupal, certificación de servicios del ecosistema y otras).
El valor añadido de la certificación FSC se compone tanto de beneficios económicos como de beneficios cualitativos.
La certificación de grupo permite que varios propietarios de bosques (privados y/o públicos) se reúnan como miembros en un solo certificado FSC de Gestión Forestal, administrado por una entidad o administrador de grupo.
España es uno de los países europeos con más certificados FSC de gestión forestal grupales, especialmente para propietarios de pequeña superficie y montes de baja intensidad de gestión (SLIMF en el acrónimo inglés FSC de Small and Low Intensity Managed Forests).
En los bosques y áreas forestales certificadas por FSC se protegen valiosos servicios del ecosistema. La verificación de servicios del ecosistema es una ampliación del alcance de la certificación de gestión forestal FSC, que permite ir más allá en la gestión responsable y sostenible de nuestros ecosistemas.
Información sobre Cadena de Custodia
En el transcurso del camino que va del bosque hasta el usuario final, los productos forestales son susceptibles de atravesar distintos procesos, transformaciones, fabricaciones y distribuciones.
La certificación FSC de Cadena de Custodia comprueba y verifica la trazabilidad de los productos provenientes de bosques certificados FSC en toda la cadena, del bosque hasta el consumidor.
De esta manera, las empresas pueden etiquetar sus productos y trasladar a los consumidores con toda garantía y fiabilidad, que dichos productos etiquetados FSC, sostienen un modelo de gestión forestal responsable.
Para facilitar el proceso de certificación de la Cadena de Custodia FSC existe la posibilidad de obtener la certificación de sitios múltiples o la certificación de cadena de custodia en grupo.
Tal y como ocurre con los certificados a nivel de monte nuestra organización no emite certificados por sí misma, ni realiza auditorías, son terceras partes independientes las que están acreditadas para realizar este proceso de certificación en la industria.
Entidades certificadoras
Las Entidades de Certificación son empresas acreditadas por ASI (Assurance Services International) para realizar auditorías de gestión forestal y cadena de custodia bajo los estándares de FSC; y emiten las Certificaciones FSC.
Productos certificables FSC
La utilización en el sector de la construcción de productos forestales como la madera y el corcho se ha extendido en los últimos años. Por ello, FSC pone a disposición del sector de la construcción la Certificación FSC de Proyectos, verificada por entidades de certificación independientes, que permite asegurar la procedencia sostenible de todos los materiales de origen forestal empleados.
Los consumidores son cada día más selectivos en sus decisiones de compra y optan por envases y embalajes con menos impacto en el medio ambiente. La progresiva desaparición del plástico, da paso al uso de materiales más sostenibles como el papel, cartón y madera. Este crecimiento debe ir acompañado de garantías de origen responsable y sostenible. FSC proporciona a las empresas la posibilidad de certificar sus envases y embalajes; y promover y sumarse a la gestión forestal responsable en beneficio de los bosques.
A pesar de la disminución del consumo de papel en nuestra sociedad, seguimos usándolo a diario: papel de imprenta, periódicos y revistas, sobres, etiquetas, incluso pañuelos y papel higiénico. Por ello, la procedencia sostenible y certificada es tan necesaria.
Los muebles de madera ocupan un lugar esencial en nuestros hogares, oficinas, terrazas y jardines. La madera como pilar del sector de fabricación de muebles destaca por su calidad, belleza, durabilidad, flexibilidad y versatilidad. Madera de roble, nogal, haya, cerezo y pino, son algunas de las especies más reconocidas. Si la madera y los muebles que decoran nuestras vidas están certificadas FSC, promovemos la gestión responsable y sostenible de miles de bosques del mundo.
Los tejidos de origen forestal, como el rayón, la viscosa, el modal o el lyocell, son cada vez más utilizados en la industria de la moda. Estos tejidos proceden de la celulosa de la madera y por tanto pueden obtenerse de bosques certificados FSC, siendo por ello más respetuosos con el medio ambiente.
La corteza del alcornoque se extrae cada 9 años para producir corcho, materia prima con la que se elaboran tapones de corcho natural, aglomerados de corcho y otros productos derivados.
Existen miles de hectáreas de alcornocal certificadas FSC en España y Portugal en las que se garantiza que el aprovechamiento y la gestión de estos montes cumple con requisitos de sostenibilidad ambiental, social y económica.
En el mercado hay industriales y empresas de transformación de corcho que solo compran corcho certificado FSC.
La certificación FSC puede aplicarse a una amplia gama de productos forestales, incluidos el caucho natural o el látex.
El FSC promueve el caucho como material renovable y natural; y garantiza mediante la certificación, el origen sostenible y responsable de su procedencia y la sostenibilidad ambiental y social de las comunidades autóctonas y locales de la zona.
Fruto de tratamientos selvícolas como podas, corta de pies muertos y claras que fomentan la vitalidad y la vigorosidad de nuestros bosques se obtienen leñas que se utilizan para fabricar carbón vegetal. El carbón vegetal es un excelente combustible natural y renovable.
El estándar nacional de gestión forestal FSC permite certificar cualquier producto que proceda del bosque lo que incluye los productos forestales no maderables como los frutos (piñones, bellotas, castañas…) la miel, las plantas aromáticas y otros productos como la carne de caza o productos de ganadería extensiva.
Existen ya iniciativas en marcha para usar la marca FSC en el mercado y con ello dar valor a los productos forestales no maderables acreditando y garantizando que provienen de bosques bien gestionados.