La pasarela peatonal más grande de Europa ha sido inaugurada en Málaga y es el principal hito de la Senda Litoral, un itinerario que permite recorrer a pie de manera interrumpida 120 kilómetros de la costa malagueña.

Se trata de una estructura de 270 metros de longitud y tres metros de ancho, lo que la convierte en la más grande de Europa de estas características. Se encuentra junto a la desembocadura del río Guadalhorce, una zona con un gran valor paisajístico y medioambiental.

En el acto de inauguración el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha destacado que este puente "ya es una realidad", a pesar de que "decían que no era posible".

La pasarela consta de siete vanos: tres corresponden a la margen derecha del río, otros tres a la izquierda y el vano central de casi 70 metros de luz que va sobre el lecho del río y para su construcción se han empleado más de 200 toneladas de madera de pino silvestre de procedencia escandinava certificado FSC y casi 15 toneladas de acero inoxidable.

La estructura, cofinanciada al cincuenta por ciento por la Diputación de Málaga y el Ayuntamiento, ha necesitado una inversión total de 1,6 millones y unirá otro tramo de la Senda Litoral, camino que, en la actualidad, permite recorrer a pie 120 kilómetros de la costa malagueña.

La madera fue el material elegido para la construcción de esta estructura debido a su perfecta integración en el paraje natural y a su durabilidad, una cuestión clave que se ha garantizado mediante un proceso de tratamiento en profundidad a presión en autoclave con sales hidrosolubles.

Para verificar la resistencia y estabilidad de la pasarela, se realizó un ensayo en túnel aerodinámico en el que fue posible determinar con gran precisión el comportamiento de la estructura frente a la acción estática y dinámica del viento.